El Pan de Coca es una de las variedades Enrich más especiales. Con una corteza fina y crujiente, y una miga extraordinariamente alveolada y poco densa, resulta un pan muy ligero con una presentación y una textura sorprendentes.

Es difícil resistirse al pan de coca… un pan único que casa con cualquier tipo de cocina, siendo un pan excelente a la hora de acompañarte en tus celebraciones o en tu día a día.

Con una corteza fina y crujiente, y una miga extraordinariamente alveolada y poco densa, resulta un pan muy ligero con una presentación y una textura sorprendentes.

Un pan, que se elabora seleccionando los mejores ingredientes: aceite de trigo y malta tostada, aceite de oliva virgen extra y masa madre de cultivo natural.

Siguiendo la tradición de Enrich, el pan de coca es un pan hecho con calma que elaboramos artesanalmente, estirando y formando la masa a mano consiguiendo que cada pieza sea única.

Su miga alveolada se consigue gracias a su altísima hidratación (del 90%), que a la vez hace que sea una masa muy delicada y difícil de trabajar.

El siguiente paso es la fermentación lenta y a temperatura controlada que aseguran una mejor organolepsia y conservación. Además, detenemos la cocción para que una vez llegues a casa, sólo necesite un toque de calor para conseguir su textura excepcionalmente crujiente.

Su sabor neutro potencia los matices de un buen aceite de oliva virgen, de un buen tomate para untar o de una fina flor de sal.

Pon a prueba tu imaginación y combínalo con diferentes embutidos, quesos, patés o anchoas! Sus características de pan crujiente, sin mucha miga, ayuda a degustar bien el sabor del relleno que lleve.